Traducir puede ser un trabajo difícil, porque en ocasiones aunque crees que eres un experto en el idioma porque lo hablas y lo lees muy bien, existen palabras que desconoces y te ves forzado a buscarlas en un traductor. Esto se complica más si eres nativo de algún idioma asiático, pues además de que el lenguaje es diferente, también lo es el alfabeto y la gramática.
Por eso nuestros amigos de otros continentes a veces comenten errores en sus traducciones, y muchos de ellos son demasiado divertidos que merecen ser compartidos.