Desde pequeños hemos crecido con la idea de que con la comida no se juega, o al menos, eso era lo que nuestras abuelas y madres solían decirnos una y otra vez a la hora de probar nuestros sagrados alimentos. Y a pesar de ser unos niños muy educados en la mesa, existen personas que decidieron desafiar al mundo culinario para hacer experimentos a la hora de emplatar dejando boquiabiertos y sin ganas de comer a más de uno.
Dale un vistazo a estas horribles y asquerosas presentaciones de comida y tu también entiende por qué con la comida nunca se debe jugar. Seguramente después de ver estas imágenes, se te quitará por completo el hambre.