Esta divertida historia fue compartida en Facebook por el padre monotemático de un niño involuntariamente gracioso. Todo comenzó en la famosa feria de ciencias y proyectos artísticos que se realiza como parte del protocolo para cerrar el ciclo escolar en el colegio donde estudia el pequeño; cuando los padres pasan tantas horas en el trabajo o preocupados por sus problemas, se acercan muy poco a supervisar las tareas y responsabilidades educativas de sus pequeños, y aunque no sabemos si este sea el caso… No le encontramos otra explicación.
El día de la feria, la obra de arte de su hijo lo sorprendió por completo. No era un dibujo de la típica casita iluminada por un sol anaranjado hecho a base de palitos, sino el impactante retrato de lo que parecía ser una patata enfadada con cuernos y prominentes atributos colgando. Entre nervios, confusión y un ataque de risa, el padre compartió una fotografía de la creación irreverente de su pequeño, consciente de que su hijo aún era muy inocente decidió ver el lado cómico sin imaginar la indignación que generaría en otros padres de familia.
Todo cambió cuando el niño le explicó que lo estaba viendo al revés, y que el personaje formaba parte de un cuento de moscas que su profesora les había contado. ¡Vaya error! Al pobre señor malpensado solo le quedó enderezar la imagen y aclarar la bochornosa situación en su perfil, pero no deja de ser graciosa la inocencia de su pequeño combinada con la mente perversa de la adultez.