La fiesta estuvo genial, el ambiente fue perfecto, las personas eran las adecuadas, el clima era el idóneo… Pero todo lo que inicia tiene un fin y te tienes que ir a casa, lo que te queda es pensar en lo bien que la pasaste.
Horas después, abres los ojos a un nuevo día y extrañamente te preguntas: ‘¿qué pasó anoche?’ y como por arte de magia llegan imágenes borrosas, confusas y probablemente tan vergonzosas que querrás desaparecerlas de tu mente para siempre… Con lo que no contabas, es que alguien tiene evidencia de lo que creías fue una noche espectacular cuando en realidad no fue más que un fiasco que terminó igual que como empezó. Tranquilo, no eres el único al que le ha pasado, la siguiente galería es una prueba de lo que otros quieren eliminar después de unas horas de sana diversión.