La vida bajo las calles de Rumanía va más allá de encontrar bichos y ratas de alcantarilla, pues en Bucarest “el París del Este ” existe otra ciudad, la ciudad de los olvidados. Luego de que se derrocará al dictador Nicolae Ceausescu y a su esposa, Rumanía quedó en un caos y miles de personas quedaron desamparadas, abandonadas y sin un techo donde vivir.
Allí nació la ciudad de los olvidados, con esas personas que en busca de un hogar llegaron a los sistemas de calefacción de Bucarest como un refugio temporal que más tarde sería lo que ellos tanto anhelaban… Debajo de las mansiones, plazas y castillos, Bucarest tiene vida.
Por lo menos dos generaciones han vivido en este lugar.
Quien mantiene el orden en la ciudad es Bruce Lee, un huérfano de la dictadura al que todos ven como a un padre.
Él provee de drogas a toda la comunidad, incluyendo a los niños que habitan en las calientes cloacas. Antes fue peleador callejero, de ahí sus cadenas,
La mayoría de sus habitantes tiene sida y tuberculosis, otros más sufren hepatitis.
Este es el único lugar donde no son vistos como escorias, y donde a pesar de las condiciones lo identifican como su hogar.
Los perros y los gatos sin hogar también son parte de ésta a la que denominan su gran familia
La entrada a este lugar es por un agujero frente a la estación del subterráneo
Sin embargo no puedes entrar si Bruce no te lo permite. Él resguarda y protege a su familia con otros pandilleros de la ciudad
“Ellos vienen a mí por la comida, el calor, el consejo de los padres, la comprensión. Somos una familia, queremos ser una familia y eso es lo que somos”.
– Bruce Lee
Esta sociedad “secreta” fue descubierta gracias al grupo de reporteros británicos del Canal 4 de noticias.