El cerebro es uno de los órganos más complejos de la naturaleza y necesita una cantidad justa de oxígeno para llevar a cabo todas sus funciones. Así que cualquier disminución o alteración en la cantidad de oxígeno, aportada por el flujo sanguíneo, puede resultar fatal y provocar un accidente cerebrovascular.
Los accidentes cerebrovasculares tienen distintas causas, pero una de las más importantes son los aneurismas. De forma bastante sencilla, se puede decir que un aneurisma es una pequeña protuberancia, como un globo lleno de sangre, que se forma en las paredes de los vasos sanguíneos. Los aneurismas cerebrales son aquellos que se originan en las venas o arterias de la base del cerebro.
Es difícil detectar los aneurismas, pues la mayoría de sus síntomas se confunden con otras enfermedades. Los síntomas comunes de los aneurismas cerebrales son dolores de cabeza localizados, vista borrosa o doble, dificultades para hablar, debilidad general y entumecimiento. La mayoría de los aneurismas diagnosticados no son fatales porque no llegan a romperse.
Pero cuando sucede liberan sangre en espacios del cerebro, causando una hemorragia que necesita atención médica inmediata. Cuando ocurre el accidente cerebrovascular hay un 50 por ciento de probabilidad de muerte. Los síntomas del accidente son intensos dolores de cabeza, párpados caídos, visión borrosa, mareos, rigidez en el cuello y pérdida de la conciencia.
Cuando se detectan aneurismas se debe tener mucho cuidado en el control de la presión sanguínea, pues hasta un ligero aumento puede provocar que estallen y causen accidentes cerebrovasculares. También es importante saber si hay miembros de la familia que han tenido accidentes cerebrovasculares. Algunos estudios han detectado factores que pueden detonar la ruptura de aneurismas.
La doctora Monique Vlak, de la Asociación Americana del Corazón, mostró algunos factores cotidianos que pueden detonar la ruptura de aneurismas:
Todos los detonantes inducen un breve y repentino aumento en la presión sanguínea, que parecen una posible causa común de la ruptura de aneurismas.
El estudio reveló el número de hemorragias cerebrales que pueden ser atribuidas a un factor detonante. A continuación verás las ocho cosas que tienen el riesgo más elevado para detonar la ruptura de un aneurisma cerebral.
8. Enojarse
Es una de las emociones que incrementan repentinamente la presión sanguínea. Los científicos que colaboraron en el estudio de la AHA revelaron que enojarse tiene un riesgo de 1.3 por ciento de provocar la ruptura de aneurisma.
7. Ser sorprendidos
Malas noticias para los amantes de las películas de terror, pero ser sorprendidos o asustados aumenta la presión sanguínea y es por eso un susto tiene el 2.7 por ciento de riesgo. Así que antes de ver un maratón de películas de terror, asegúrense de no tener aneurismas.
6. Beber refresco
Las bebidas carbonatadas son en muchos sentidos peligrosas, pero para las personas con aneurismas son de cuidado. Esto se debe a que la cafeína que incluyen aumenta la presión y eso hace que beber refresco tenga un 3.5 por ciento de riesgo.
5. Estreñimiento
Una mala digestión es ya de por sí un problema que se puede volver serio, pero además resulta doblemente peligroso cuando las personas tienen problemas para ir al baño y sufren aneurismas. El esfuerzo que hacen las personas para liberar sus desechos aumenta la presión y esto da un puntaje de riesgo de 3.6 por ciento.
4. Los placeres de la cama
El sexo es una de las mejores cosas que existen en este mundo… pero si tenemos aneurismas, ponerse “romántico” puede ser el último placer que se va a disfrutar. El sexo acelera el ritmo cardiaco y por supuesto la presión sanguínea. Por eso hay un riesgo de 4.3 por ciento de ruptura de aneurismas. Si después de tener sexo sienten un repentino dolor de cabeza sería bueno acudir al médico para una revisión.
3. Sonarse la nariz
Es parte de los hábitos de higiene, pero una sonada de mocos podría costarle la vida a una persona. Sonarse la nariz es un gran riesgo para las personas con aneurismas cerebrales debido a que aumenta la presión sanguínea del cráneo. Limpiarse la nariz sonándose tiene un riesgo de 5.4 por ciento.
2. Ejercicio físico vigoroso
Claro que hacer ejercicio es parte de una vida saludable, pero también es riesgoso hacerlo si existen aneurismas cerebrales. Contrario a lo que algunos creen, ejercicios como levantamiento de pesas incrementan la presión sanguínea y ese esfuerzo realizado tiene un puntaje de riesgo de 7.9 por ciento.
1. Beber café
Llegó la hora de la peor noticia: beber café es lo más riesgoso que puede hacer una persona con aneurismas. A todo mundo le fascina el sabor de una deliciosa y espumeante taza de café, pero debido a la cafeína esa bebida es el mayor riesgo que puede provocar la ruptura de aneurismas cerebrales.
A causa de que aumenta la presión sanguínea, beber café tiene el más alto puntaje de riesgo de provocar ruptura de aneurismas. La AHA estima que tiene un 10.6 por ciento de riesgo. Qué lástima.