No todos los hombres son iguales, prueba de ello es Eric, quien con solo 21 años tomó la completa responsabilidad de su bebé luego de que su novia, y madre del pequeño, lo abandonó.
En lugar de llorar, se puso a trabajar
No tenía a nadie que le ayudara a cuidar a su bebé, pero eso no se convirtió en excusa para que se dejara caer, al contrario, le dio otro motivo más para superarse, así que buscó un empleo que le permitiera llevarse todos los días a su pequeño.
Se convirtió en barbero
Así puede atender tanto a sus clientes como a su hijo, quien descansa plácidamente en un portabebé.
Lo alimenta y le cambia los pañales en la barbería
Los clientes y los jefes se han mostrado muy comprensivos respecto a su situación, incluso, a algunos de ellos les gusta arrullar al bebé de vez en cuando.
Eric dice que todo su esfuerzo vale la pena
A pesar de ser tan joven y estar solo, Eric no se arrepiente de ser responsable de su hijo, pues el pequeñito le ha dado un motivo para vivir y es su razón para superarse y aprender a ser mejor padre.