La impactante historia de Hope, el pequeño niño que fue rescatado casi muerto de las calles de Nigeria, te romperá el corazón…
Esta inocente criatura fue botada a la calle luego de que sus padres creyeran que nació siendo un brujo.
La ignorancia y la falta de educación provoca que cada año cientos de pequeños sean arrojados a las calles y abandonados a su suerte para morir por la creencia de que nacen siendo brujos, hechiceros o que algún demonio los ha poseído.
El caso de Hope le dio la vuelta al mundo luego de que la danesa Anja Ringgren Loven, fundadora de African Children’s Aid Education and Development Foundation, lo encontrara en las calles vagando solo, completamente desnudo, enfermo, malnutrido y en un estado de deshidratación severa.
Ninguna persona a su alrededor lo ayudaba, nadie le prestaba atención.
No obstante, la desgarradora fotografía de Hope, sediento y con hambre, fue publicada en la cuenta de Facebook de la ONG; y a partir de ese momento el mundo conoció la historia de miles de niños que han pasado por esta situación.
“Un niño no puede sobrevivir mucho tiempo solo en las calles. Así que se preparó de inmediato una misión de rescate. Al llegar al lugar lo encontramos desnudo, extremadamente delgado y enfermo. Quedé impactada, lo primero que hice fue darle agua y algo de comer”.
Ellos dieron con Hope gracias a una llamada acerca de un pequeño de dos o tres años que deambulaba solo en un barrio de la ciudad, alimentándose de las sobras que le arrojaban algunas personas.
Luego de que se hiciera el rescate y se llevaran al niño al hospital, una persona del equipo posteó varias fotos sobre la historia de Hope pidiendo donaciones para poder pagar el alto costo del tratamiento que requería; el niño estaba lleno de parásitos, desorientado y sin energía debido a su malnutrición.
Horas más tarde, miles de personas que vieron la publicación ya habían donado en ayuda para Hope.
Hasta el momento llevan más de un millón de dólares recaudados. Jamás imaginaron la ayuda que podían recibir.
Con ese dinero también planean construir una clínica para el cuidado especial de estos pequeños y una escuela; para eliminar la ignorancia, el principal elemento por el cuál suceden este tipo de abandonos.
Anja vive en Nigeria con su familia desde hace tres años, ella quiso cambiar su vida de Dinamarca para dedicarla a los niños que viven en estas condiciones.
Fue tan grande su impresión que no pudo soportar no hacer nada al respecto.
“Lo que vi era tan bárbaro y terrible que dejó una profunda impresión en mí (…) por eso vendí todo lo que tenía en Dinamarca para dedicar mi tiempo y mi vida a estos niños”.
Junto su pareja David, ahora dirigen esta fundación que rescata y acoge a los niños que han sido abandonados luego de que se crea que son brujos o demonios. A la fecha cuentan con 34 niños que han podido sobrevivir a este sufrimiento.
“Miles de niños son acusados de ser hechiceros y hemos visto cómo los torturan. La condición de Hope es estable ahora. Come y responde al medicamento que recibe. Hoy en día tiene energía para sentarse y nos sonríe, es un pequeño muy fuerte”.
Por actos de amor como los de esta mujer y la fundación que lleva a su cargo, aún podemos creer que la humanidad tiene esperanza para poder cambiar y abrir sus ojos, a fin de actuar contra la ignorancia y la desigualdad social en el mundo.