La energía negativa aunque es algo intangible y no puede comprobarse como tal, la gran mayoría de las personas ha sentido su nefasto influjo sin saber exactamente de dónde proviene y lo que si puede notarse es lo malos ratos que te hace pasar y esa incomodidad de cargar un gran lastre a cuestas. Pero no todo está perdido, aunque muchas veces no depende de tí esa fluctuación cósmica, sí puedes mantenerla a raya.
¿Pero cómo podemos canalizar esa negatividad hacia un entorno más positivo?
1. Rodéate de amor
Dicen que el amor es la energía que repele todo lo negativo y está comprobado que si piensas de manera positiva todo irá mejor, así es la magia del amor. Pero el primer lugar en dónde buscarlo es dentro de ti, de ahí todo lo que irradies será congruente, recuerda que los cambios van de adentro hacia afuera nunca al revés.
2. Revisa tu respiración
Busca concentrar tu respiración en exhalar negatividad e inhalar calma para modificar lo dañino que se absorbió dentro de ti, verás que agradable es saber que tú eres agente de cambio.
3. Protégete
Un buen ejercicio para generar un campo energético que no deje entrar la negatividad, pero sí la energía positiva es imaginar que una luz blanca te rodea que se posa sobre tu cabeza. ¿Qué sencillo, no crees?
4. Que la vida esté siempre cerca de ti
Que tu espacio, tu pequeño mundo esté rodeado de ventanas por las que entre el sol el aire y la vida, plantas que absorban la energía negativa y te regalen aire limpio y fresco, tu música favorita, tus colores preferidos que lo que te hace feliz esté siempre contigo.
5. Identificar las emociones
Así como te comentamos que el cambio proviene de adentro hacia afuera, la emociones que tu estés pasando emanarán en energía positiva o negativa. Ahora bien, hay personas que emanan esa energía lo cual no implica que debas alejarte de ellas sino que al contrario, las ayudes pero no cargando emociones o problemas que no te corresponden.
