Faltan meses para Navidad, pero Brody Allen, de tanto solo dos años, no lo sabe.
Su familia ha colocado el árbol navideño, colgaron adornos de temporada, instalaron luces y han puesto uno que otro Santa Claus por la casa y el jardín.
¿El motivo? Al pequeño Brody le quedan escasas semanas de vida; un cáncer muy agresivo ha deteriorado su salud y no puede esperar más.
Para darle alegría a sus últimos momentos, su familia decoró de ambiente navideño su hogar porque es la festividad favorita de Brody.
Y no solo eso: los vecinos se conmovieron tanto que, en un acto de solidaridad, también decoraron todo el vecindario, ¡la Navidad era oficial en aquel barrio Cincinnati, Estados Unidos!
Como un último regalo se organizó un desfile navideño el 23 de septiembre con villancicos, superhéroes y, por su puesto, Santa Claus.
Brody pasó la mejor Navidad de su corta vida…
“Es conmovedor porque sé que será su última Navidad. Es muy difícil, pero me encanta ver sus ojos llenos de alegría. Lo hicimos para hacerlo feliz”, dijo la madre de Brody.