El Monte Huashan recibe al año a miles de turistas, así mismo, es uno de los escenarios más sagrados, espectaculares y peligrosos de China.Es por ello que las increíbles imágenes que verás a continuación te demostrarán los peligrosos de uno de sus pasaje que en realidad llevan a un hermoso lugar.
En lugares tan sagrados como estos sentirás, al llegar, que ha valido la pena atravesar su arriesgado camino.
El Monte Huashan, también conocido como el “sendero más peligroso del mundo” está ubicado a 120 kilómetros de la famosa ciudad de X’an, y es una de las 5 montañas sagradas del Taoísmo.
El nombre de Huashan significa flor, y esto es debido a que una vez alcanzada la cima, de un ángulo específico, es posible ver los otros cuatro montes sagrados, los cuales forman una especie de flor; además, cada uno de los cinco picos esta relacionado con los cinco elementos: agua, fuego, metal, madera y tierra.
Los desafíos a lo largo del camino hacia el monte comienzan por subir 370 escalones verticalmente alineados y con cadenas sobre un precipicio de más de 300 metros de altura; estos están tallados en piedras y son conocidos como “escaleras al cielo”.
Estás escaleras suben tan alto que es difícil ver dónde terminan. Aunque son maravillosas y lucen bastante desalentadoras, son la parte más fácil del camino y poca gente sigue más allá de ellas.
Al terminar hay otras escaleras que conducen a un camino hecho de tablones de madera, que aunque no es obligatorio usar algún equipo de seguridad, su uso es altamente recomendable.
La parte “Changong Zhandao” es conocida como la más peligrosa del recorrido, debido a que tiene una altura de 4 metros de largo y alrededor de 30 centímetros de ancho; todo esto a lo largo de un camino sobre un acantilado vertical sobre el cual tienes que caminar sostenido de unas cadenas pegadas a la montaña. Un paso en falso te haría caer al abismo.
El siguiente tramo vertiginoso es conocido como “Dragón negro”, esculpido en una larga y empinada arista de una roca con apenas unos pocos centímetros de anchura. Enseguida se tiene que subir a través de paredes prácticamente verticales donde se tiene que trepar sostenido de cadenas oxidadas y viejos escalones.
Se podría llegar a pensar que esta peligrosa ascensión está hecha especialmente para personas expertas en escalar, pero existe mucha gente sin preparación que se atreve a llegar a la cima de la montaña, pues todo esto llega a ser un reto tanto espiritual como físico.
El tiempo que se tarda en ascender del pueblo al pie de la montaña por el sendero es de 10 horas aproximadamente. Sin embargo, para suerte de los menos atrevidos existe un teleférico que los deja en la cima por un módico precio que los turistas pagan, pero que los peregrinos no se pueden permitir. El vértigo a la altura de esta montaña no se puede evadir ni en el teleférico.
Sí eres una de esas persona a las que les gusta la aventura y te decides a subir a la cima de la montaña Huashan, en lo más alto encontrarás un espectacular templo Taoísta donde hay una tetería.
Cada año son más las personas que hacen esta peligrosa excursión para llegar al templo y tomarse un té.