Por más de cien años el automóvil se ha considerado el principal medio de transporte; sin embargo, hoy en día trasladarse en coche no es una de las manera más breves de transportarse, ya que, por ejemplo, en Londres es más rápido llegar en bicicleta que en coche.
Los conductores en Los Ángeles pasan alrededor de 90 horas atorados en el tráfico, por lo que un estudio británico arrojó que los conductores pasan 106 días de su vida buscando estacionamiento.
Es por eso, que en base a ese estudio, algunas ciudades comenzaron a crear zonas peatonales donde se prohíbe el tráfico de automóviles, y como era de esperarse los cambios están siendo efectuados en las principales ciudades europeas, las cuales ya comenzaron a ponerlas en práctica.
En la siguiente lista te dejamos las ocho ciudades de todo el mundo que están esforzándose por reducir el uso del coche.
1. Copenhague, Dinamarca
Es la ciudad con menos cantidad de coches en Europa, ya que más de la mitad de la población se traslada en bicicleta todos los días. Desde 1960 Copenhague comenzó a incluir zonas peatonales en el centro de la ciudad, zonas que poco a poco se fueron ampliando mientras que las carreteras de la ciudad disminuían.
Actualmente la ciudad cuenta con más de 320 kilómetros de carriles para bicicleta, y se planean desarrollar nuevas autopistas de bicicletas con el fin de llegar a los suburbios circundantes.
2. Hamburgo, Alemania
Esta ciudad no tiene la intención de prohibir los coches, pero sí de buscar la manera en que las personas tomen el hábito de caminar, moverse en bicicletas y en el transporte público.
Es por eso que planean llevar a cabo el proyecto “red verde”, con el cual buscan construir una red de caminos que conecte los parques de toda la ciudad, por lo que sólo será posible recorrerlos caminando o en bicicleta. Esta red cubrirá el 40% de la ciudad.
3. Madrid, España
La mayoría de las calles centrales de Madrid tienen prohibido transitar en coche, y la persona que se atreva a violar esta regla tendrá que pagar una multa de 100 dólares, a excepción de que sean vecinos de ese barrio.
Este sólo es el primer paso para peatonalizar complemente el centro de Madrid en los próximos cinco años, ya que se espera que veinticuatro de las calles más transitadas de la ciudad sean rediseñadas para caminar y no para conducir.
4. París, Francia
Hace algunos años el nivel de contaminación en París tuvo un aumento dramático, por lo que las autoridades prohibieron que los automóviles con placas de número par transitaran un día mientras que las placas impares no transitaran al día siguiente.
Esta medida funcionó y el nivel de contaminación disminuyó en un 30%. Es por eso que en 2020 el gobierno planea contar con más carriles para bicicletas y permitirá la entrada al centro sólo a los coches eléctricos. Actualmente existen algunas zonas peatonales en el centro de París, por lo que los vecinos de esos lugares tienen prohibido conducir allí los fines de semana.
5. Helsinki, Finlandia
Se cree que los habitantes de esta ciudad incrementarán los próximos 10 años y que el número de coche disminuirá. La ciudad intenta crear un proyecto donde busca transformar el tráfico de automóviles en suburbios.
Se han desarrollado algunas aplicaciones móviles para que los ciudadanos encuentren lo más pronto posible un alquiler de bicicletas más cercana o una parada de tranvía. Por lo que los automóviles serán cada vez menos necesarios en Helsinki.
6. Chengdu, China
Esta ciudad está diseñada para llegar a cualquier lugar en 15 minutos a pie. En esta zona no están completamente prohibidos los coches, ya que el tráfico de automóviles se permite sólo a la mitad de la carretera, mientras que la otra mitad es utilizada por los ciclistas y los peatones.
7. Bogotá, Colombia
En Bogotá los carriles para bicicleta y zonas peatonales fueron construidos en 1950, por lo que hoy en día existen 300 kilómetros de carriles para bicicletas y en la mayoría de las calles no se usan los coches y sólo se permite el uso de transporte público.
8. Milán, Italia
Milán está empleando una nueva técnica para disminuir el uso de coches en la ciudad regalando vales de transporte público para que los pasajeros dejen sus vehículos en casa.