A la mayoría se nos ha derramado el vino sobre la alfombra o sobre nosotros mismos. Y pareciera que no existe una solución para este tipo de accidentes, pues la mancha de vino es muy difícil de quitar. Sin embargo, las personas de Super Duper Estudio han dado forma a unas increíbles y estéticas copas de vino que evitan que la bebida no se derrame.
La parte cónica del vaso permite que pueda sostenerse en cualquier superficie plana, mientras que el ángulo ancho de la copa la ayuda a equilibrar perfectamente cualquier movimiento.
Las copas de vino fueron diseñadas con tallos para evitar la transferencia del calor de la mano al líquido. Esta parece ser la pequeña desventaja con la que cuentan estas copas, pues debido a su forma la temperatura de la mano afecta la temperatura del vino; sin embargo no hay tanto problema con el vino rojo o el blanco.
Las diferentes interacciones de vidrio que se crearon fueron probadas y adaptadas para poder perfeccionar su forma.