Un grupo de estudiantes de Winnipeg, en Canadá, descubrió durante excavaciones de rutina en la Reserva Menemonee una vasija con semillas de calabaza con 800 años de antigüedad. Situación que en un principio los hizo dudar, pero luego de pruebas de validación descubrieron que esto era real.
Estos chicos optaron por buscar un lugar para germinarlas y sembrarlas. En un principio no sabían qué vegetal saldría de la tierra; sin embargo, con el paso de los meses descubrieron que se trataba de enormes calabazas extintas hacía ya algunos siglos.
Esto fue lo que encontraron cuando la abrieron: un montón de semillas extrañas y muy grandes. Por lo tanto las analizaron de inmediato
Tuvieron que pasar poco más de 3 meses para que pudieran saber qué vegetal habían cultivado
Más tarde se dieron cuenta que era una calabaza, y que ésta calabaza tenía un gran número de semillas en su interior
Ahora creen que este alimento es completamente comestible y, lo más importante: ¡han revivido una legumbre extinta hace 800 años!
Los estudiantes lo llamaron “gete-okosomin”, que significa “Calabacín viejo genial”
¿Quién pensaría que de un proyecto de clase el hombre se reencontraría con una legumbre perdida hace ya ocho siglo?
¡En horabuena!