Zhao Lang, el propietario de un restaurante en Jinan, China, planeó una loca estrategia de marketing con un doble propósito: atraer a más clientes a su negocio y que al mismo tiempo se motivaran a cuidar su figura. Suena un poco contradictorio y nada favorecedor para su local, pero es China, ¿qué se puede esperar?
El hombre instaló barrotes en la entrada de su local, cada uno más estrecho que el otro, y las personas que logren pasar por alguno de ellos obtendrán rebajas en el menú, ¡hasta comer sin pagar un solo centavo! Esto último solo si ingresan entre los barrotes más estrechos que miden solo 15 centímetros, ¡qué locura!
La siguiente medida es de 18 centímetros y si lo haces te llevas cinco cervezas; el siguiente es el barrote de 25 centímetros y ganarás solo una cerveza. Por último, a los que puedan ingresar por la medida de 30 centímetros no se les dará nada, pero el letrero colocado en la parte de arriba les recuerda que deben moderarse con la comida y se engalana con la siguiente frase: “¿Estás realmente seguro que debes seguir bebiendo cerveza?”.
Suena loco, ¿verdad? Mira algunas fotografías a continuación.
1. Zhao Lang posa con sus barrotes locos
2. Muchos quieren intentarlo, pero pocos lo logran
3. Solo algunas mujeres han logrado pasar la prueba de los barrotes más angostos
Esta estrategia ha atraído a muchísimos clientes nuevos al restaurante con la intención de poner a prueba su figura, y a pesar de que es casi imposible, por lo menos un cliente al día logra ingresar por los barrotes más estrechos. Para Zhao es importante que la gente cuide su dieta y espera que de esta manera puedan motivarse.
“Tantísima gente me ha dicho que no pueden perder peso porque no consiguen dejar de beber cerveza. Tal vez esto les sirva como recordatorio para cuidarse”, comentó el ingenioso propietario.
Y no, no te tomamos el pelo, mira la prueba:
¿Qué opinas de esta loca estrategia? ¿Crees que puedas superarla?