Hemos encontrado diversas respuestas científicas a esas preguntas que en ocasiones son vergonzosas. ¿Alguna vez te has preguntado por qué los hombres tienen erecciones matutinas?, ¿por qué vamos al baño tras el primer sorbo de café? o ¿qué pasa si te aguantas un gas?
Las respuestas a estas y otras preguntas respecto al imperfecto comportamiento humano te las presentamos aquí.
1. ¿Por qué nos gusta oler nuestros gases?
Científicos confirmaron que preferimos oler nuestras flatulencias debido a que ese aroma nos identifica como únicos. “Cuando hueles un silencioso pero mortal gas tu cerebro lo detecta como algo que está tratando de dañar tu cuerpo a causa del mal olor “, asegura el HuffingtonPost UK.
2. ¿Por qué seguimos teniendo mal aliento aun después de lavarnos los dientes?
Cepillar tus dientes los limpia pero no te quita el mal aliento. Esto se debe a que la mayor parte de las bacterias que causan el mal aliento provienen de la lengua y garganta, lugares que no tallamos las tres veces recomendadas del cepillado. Cuando a tu boca no le entra suficiente oxigeno emite componentes de sulfuro que provocan ese olor a muerte.
3. ¿Contamino el mar si me orino en él?
No pasa nada. Ni contaminas, ni dañas al organismo. La orina se compone por un 95 por ciento de agua y algunos iones de sodio y cloro, químicos que encontramos de forma natural en el océano. Lo único que hace diferente a la orina es la urea, que está formada a base de carbono y que ayuda al cuerpo a deshacerse del nitrógeno. Pero por si no sabías, cuando el nitrógeno del urea se combina con el agua produce amonio, un compuesto que actúa como alimento para la vida vegetal marina.
4. ¿Qué pasa si orinamos en la piscina?
En los 80’s se creía que si orinabas en la piscina se formaba un químico tóxico llamado cloruro de cianógeno que derretía la piel y dañaba los globos oculares; sin embargo, para que esto suceda debe haber 2 terceras partes de agua por una de cloro. Por tanto, aunque es químicamente seguro orinar en una piscina lo más recomendable es que salgas y uses el baño. Nadie quiere nadar a través de una nube amarilla.
5. ¿Por qué tenemos ganas de defecar después de tomar café?
¿Has sentido ciertos retortijones que inmediatamente te envían al baño tras tomar unos sorbos de tu café mañanero? Al parecer esto le sucede al 50 por ciento de los bebedores habituales de café, ya que éste estimula las contracciones musculares a lo largo de la última parte del intestino grueso; algo que la ciencia llama colon rectosigmoide, responsable de la propulsión y transferencia de la materia fecal fuera del cuerpo.
6. ¿Por qué tenemos verrugas en los dedos?
Todas las verrugas son infecciones causadas por el virus del papiloma humano, y hay más de 100 variedades de éste, desde la más contagiosa que causa las verrugas genitales hasta la más inofensiva que provoca verrugas comunes en manos y dedos. Cuando este virus invade la capa externa de la piel, generalmente a través de una cortada o arañazo, causa un rápido crecimiento de las células en la capa externa de la piel. A esto lo llamamos verruga.
7. ¿Por qué nos da resaca?
Esto se debe a una acumulación de varios factores. 1: el alcohol te hace orinar más, lo que acelera la deshidratación; 2: el alcohol aumenta la producción de los ácidos del estómago y ralentiza la velocidad a la que el estómago se vacía, lo que provoca náuseas y vómitos; y 3: beber a menudo hace que los vasos sanguíneos se dilaten, lo que puede causar dolores de cabeza. Si juntamos todos los síntomas tendremos la peor mañana de nuestras vidas.
8. Los hombres tienen erecciones matutinas ¿Por qué?
La erección matutina tiene el nombre científico de tumescencia peneana nocturna o TPN, y es un hecho perfectamente natural experimentado de 3 a 5 veces por noche en hombres sanos, independientemente de lo que estén soñando. Esto se debe a que el cuerpo desencadena la TPN para estirar los cuerpos cavernosos (las dos regiones que se llenan de sangre y provocan la erección) para ayudar a prevenir la enuresis y la disfunción eréctil.
9. ¿Por qué nos entretiene apretar nuestros moretones o quitar las costras de las heridas?
A nivel neurológico se le llama gestionar el dolor, pues cuando una zona del cuerpo está adolorida nuestro cerebro nos dice: “provoca a tus receptores del dolor, pues la activación de estos receptores mitiga de forma inconsciente el dolor. En el caso de las costras es algo que se tiene de manera instintiva. Aunque algunos psiquiatras lo pueden llegar a relacionar con un trastorno obsesivo compulsivo o simple ansiedad por falta de activación física, la mayoría coincide en que es algo arraigado de nuestros ancestros, cuando acicalarnos o lamer nuestras heridas era común.
10. ¿Se puede morir de viejo?
Técnicamente no. Todos los órganos y partes de nuestro cuerpo tienen un tiempo finito y se desgastan a lo largo de la vida, por lo que en algún momento algo dejará de funcionar y provocará la muerte. Esto puede significar un mal funcionamiento de órganos o incluso un paro cardio-respiratorio. Las células viejas no pueden luchar contra una enfermedad o regenerarse con la misma facilidad como cuando jóvenes. En resumen: las enfermedades y lesiones que apenas afectarían a una persona joven podrían ser fatales para un anciano.
11. ¿Por qué nos hacemos pipí cuando tenemos miedo?
La culpa de esto la tiene tu cerebro, pues en condiciones de estrés las señales inhibitorias del lóbulo frontal pueden ser anuladas por el sistema límbico (sistema formado por varias estructuras cerebrales que gestionan respuestas fisiológicas ante estímulos emocionales). Así pues, frente al estrés y la ansiedad, las señales eléctricas del sistema límbico se vuelven tan intensas que el tronco cerebral tiene problemas para seguir las órdenes del lóbulo frontal. Es por esto que muchas personas orinan ante cualquier situación que les provoque cierto nerviosismo o ansiedad.
12. ¿Por qué cuando estamos nerviosos nos sudan las manos?
La condición del sudor excesivo en las palmas de las manos se conoce como hiperhidrosis palmar y es causada por dos elementos diferentes: por el estrés emocional y porque el cuerpo está tratando de controlar su temperatura, algo conocido como termorregulación. Ambos estados están entrelazados, y cuando nos emocionamos, asustamos o nos ponemos nerviosos se produce una reacción en el sistema nervioso simpático que estimula las glándulas ecrinas de la cara, las palmas de las manos, las plantas de los pies y las axilas.
13. ¿Por qué cuando se erecta el pene se va ligeramente de lado?
Aunque te lo hayan dicho, no tiene nada que ver con la masturbación. Casi todos los hombres notan que su pene va hacia un sentido o hacia otro. La curva es, generalmente, leve y no debe ser motivo de alarma. La dirección en la que apunta es decidida por el ligamento que rodea al cuerpo cavernoso del pene, llamado túnica albugínea. Las diferencias en la elasticidad de este órgano de dos cámaras hace que el pene se curve cuando está erecto.
14. ¿Por qué a veces se tapa solo una fosa nasal?
Porque son tan amigas que se reparten el trabajo. Es en serio, es así como funciona: las fosas nasales dividen la carga de trabajo por la mayoría del aire que entra y sale de un orificio nasal, y una cantidad mucho más pequeña que pasa por el otro. Cada pocas horas el sistema nervioso autónomo que se encarga del ritmo cardíaco, la digestión y otros factores que no controlas conscientemente hacen que la otra fosa nasal haga el trabajo pesado por un tiempo.
15. ¿Es malo aguantarme los gases?
Las flatulencias son una parte natural del proceso digestivo. Si tienes uno significa que tu cuerpo tiene exceso de gas que necesita expulsar y que debes dejar salir. Pero, ¿y si socialmente es imposible en ese momento? Si lo mantienes dentro el impulso suele pasar, sin embargo no es recomendable para los intestinos. Los gases no expulsados pueden causar distensión abdominal y otros síntomas molestos; y si lo haces con frecuencia el gas reprimido puede causarte hemorroides o un intestino distendido. Además, tienes que saber que si te los aguantas durante todo el día saldrán tan pronto como te duermas.
16. ¿Por qué vomitamos cuando nos mareamos?
La respuesta corta es: debido a que tu cerebro piensa que está siendo envenenado. Apuesto a que no lo esperabas, ¿eh? El vómito ocurre por una de estas tres razones: cuando algo irrita al cerebro, cuando algo irrita a tu intestino y cuando algo pone a tus hormonas fuera de control (por lo general el embarazo). Te voy a poner un ejemplo: cuando estás siendo catapultado o agitado drásticamente en un juego de feria el cerebro sospecha que algo no va bien y, sólo para estar seguro, expulsa el contenido de tu estómago.
17. ¿Por qué cantamos en la ducha?
Una vez más la ciencia no es concluyente, no obstante hay dos teorías principales. Una de ellas sostiene que nos sentimos más relajados y cómodos en la ducha, por no hablar de que estamos normalmente solos; la otra teoría es que el azulejo, plástico, vidrio o cerámica que recubre tu cuarto de baño crea un ambiente acústicamente agradable, lo cual hace que tu voz suene más completa ocultando las imperfecciones en el tono y la afinación, por lo que te sentirás más seguro de cantar a todo pulmón.
18. ¿Por qué tenemos canas?
El tono del cabello depende enteramente de la secreción de pigmentos de melanina, ya que por sí solo no tiene color. Esta es la razón por la que el color del cabello puede cambiar con el tiempo, pues cuando una persona envejece el cuerpo deja de producir paulatinamente el pigmento y el pelo vuelve a su estado natural: gris o blanco. Así mismo, el envejecimiento de la melanina está controlado genéticamente, por lo que ocurre mucho más temprano para algunas personas.
19. ¿Por qué los hombres tienen pezones?
Debido a que las mujeres son el género superior, ¡en serio!: ¡todo humano nace como mujer en el vientre materno! Durante las primeras semanas el embrión sigue el modelo femenino, en el cual se desarrollan los pezones; no obstante después de 60 días aparece en escena la testosterona para producir el cambio de la actividad genética de las células de los órganos genitales y el cerebro. ¿Y los pezones? Los pezones se quedan donde estaban y simplemente no terminan de desarrollarse como lo harían en el caso de una mujer.