Los asiduos creyentes de las diversas teorías sobre el fin del mundo, comenzaron a difundir -o más bien a retomar- una que ya había circulado en dos ocasiones anteriores. Se trata de la supuesta existencia del planeta Niburu -que significa “objeto que cruza”, según los babilonios- y su ahora sí inminente acercamiento para destruir la Tierra, aproximadamente en octubre de 2017.
La teoría -que se basa en los antiguos documentos sumerios- señala que un misterioso planeta azul se acerca a nuestra órbita y que será la gravitación de Niburu la que destruya la Tierra. Defienden que no ha sido descubierto por los científicos “debido a que tiene una aproximación oblicua en relación a la Tierra”. El incremento en la actividad sísmica es otro de los motivos por los que aseguran que Niburu está cerca.
David Morrison, científico de la NASA, se ha encargado de desmentir estas teorías.
“No hay evidencia creíble para demostrar la existencia de Niburu. No hay imágenes ni se han hecho observaciones astronómicas”.
El científico difunde la información comentando que se habla en muchas ocasiones del Planeta X, un concepto con el que los astrónomos se refieren a un cuerpo celeste que aún no ha sido descubierto, pero del que se tienen sospechas.
También argumenta que de ser verdad que existiera algún planeta cercano a la órbita de la Tierra, hubiera entrado ya a Marte y sería visible para nuestros ojos aunque, según los rusos, ellos ya pueden observar a Niburu desde el cielo.