Un pozo de conversación es una obra de diseño de interiores que aprovecha los relieves de hundimientos o depresiones de los diferentes terrenos. Estas depresiones -también llamadas “sala de estar hundida”-son incorporadas dando resultados únicos y espacios íntimos para relacionarse; un estilo muy popular entre las décadas del 50 y 70.
Durante el año 1958, los arquitectos Eero Saarinen y Alexander Girard emplazaron un pozo de conversación como parte fundamental de la Casa Miler en Columubus, Indiana, logrando gran repercusión con un rápido crecimiento del concepto y desarrollo de obras similares.
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