Conoce al guante que podría cambiar la vida de quienes padecen el Parkinson. Este tratamiento alternativo sin fármacos para los temblores de este síndrome, podría pronto aparecer en el mercado mundial.
A la fecha no existe una cura y una causa exacta que determine el porqué del mal del Parkinson. Solo se sabe que es un trastorno neurológico degenerativo que afecta aproximadamente entre 7 y 10 millones de personas en todo el mundo, según informó en 2015 la Parkinson’s Disease Foundation.
Este se manifiesta a través de temblores sin control en las que se ven afectadas particularmente las manos, mermando la calidad de vida del paciente. La propuesta del guante elaborada por GyroGlove no requiere ningún tipo de medicación, esta se encuentra más encaminada hacia el área de la física, en la cual no se requiere más que la aplicación correcta de las leyes de dicha ciencia para ayudar a estabilizar la mano de quien lo padece por medio de la mecánica.
Faii Ong es el joven de 26 años que creó este guante, con el que asegura no solo estabilizará estos temblores, sino también los temblores esenciales que son 8 veces más comunes que los del Parkinson, según la Fundación de Temblores Esenciales.
“Se siente como si la mano se moviera a través de una masa líquida pero densa, lo que significa que puedes hacer movimientos suaves y lentos y que cualquier temblor fino se contrarresta automática e instantáneamente. Puedes hacer lo que tengas qué hacer; preparar tu café, cocinar, esa clase de cosas”.
El funcionamiento es sencillo:
Una cubierta giratoria ayuda a mantener firme la mano de quien lo usa; éstas se mantienen rectas al girar, es decir, resisten a cualquier fuerza que se aplique de forma inmediata y proporcional, lo que da como resultado que quien esté pasando por una crisis de temblores no tendrá que hacer nada al respecto.
“Eso es exactamente lo que estamos haciendo con el guante, solo que lo estamos llevando más allá. Hacemos que gire el disco más rápido que la turbina de un jet, a unas 20 mil rpm y eso lo acoplamos directamente a la mano”.
La idea de Ong surgió luego de que viera a una paciente ya mayor sufrir este padecimiento, durante sus practicas de estudiante. Como testigo vio los efectos de los temblores y sintió la necesidad de ayudar a esta gente. Ong no podía soportar la idea de ver como disminuye la calidad de vida con este síndrome.
“Ella trataba de beber su sopa y luego derramó todo. Pasé la siguiente media hora limpiándola y les pregunté a las enfermeras por qué no hacían nada. Ellas dijeron que debido a su estado, no había nada qué hacer por ella”.
Al inicio del proyecto en 2015, el equipo se encontraba con problemas de financiamiento por lo que podían hacer era poco, pues utilizaban recursos propios para desarrollar el guante. Tiempo más tarde, y con búsqueda de patrocinadores, se encontraron con el apoyo del Imperial College de Londres y de Tony Young, Director Clínico Nacional del Servicio Nacional de Salud De Reino Unido.
https://www.youtube.com/watch?v=gFzHYU3aVAY
Esto les ayudo a lanzar el proyecto al 100 por ciento. Su tecnología se considera admirable por científicos médicos de diversas partes del mundo, porque ya existen otros productos en el mercado que ayudan a contrarrestar este mal como las cucharas, plumas o tazas especiales, pero ninguna ofrece la solución como la de GyroGlove.
“Construimos un aparato que simulaba temblores de mano muy intensos. Logramos una reducción del 90 por ciento en temblores, y eso solo fue una prueba. En teoría, esto podría beneficiar enormemente a las personas que tienen parkinson, pero como ocurre con todas las tecnologías nuevas, será necesario hacer más investigaciones para determinar su efectividad a corto y largo plazo”.
-Stuart Palma. Asesor de la Sociedad Colegiada de Fisioterapia en Reino Unido.
Se espera que este prototipo salga a la venta en Reino Unido en 2016 y tendrá un costo entre 600 y 800 dólares. Además se cree que el guante puede usarse para otras actividades relacionadas con la arquería, la fotografía y la para la misma practica médica, por su gran capacidad de estabilizar las manos; sin embargo, no se tiene pensado explorar campos nuevos aún. El objetivo principal de este guante seguirá siendo, por lo pronto, el Síndrome del Parkinson.
Una de las satisfacciones más grandes que le ha dado el GyroGlove al equipo es que, al momento de probarlo en una mujer de 71 años, quien había padecido temblores durante 40 años, haya mostrado su felicidad y llanto de alegría al sentir que sus manos dejaron de temblar con el prototipo.
“Aún con nuestro prototipo más sencillo, que actualmente tiene unos cuatro o cinco meses de antigüedad, pudo tomar una botella de agua, cosa que suele ser asunto de dos manos en uno de sus días buenos. Fue un momento hermoso porque representó un punto en el que pudimos decir que sí, todo ese esfuerzo ha valido la pena”.
Se espera que de funcionar en el mercado, este guante guante es extienda a toda Europa para luego llegar al continente americano.
