Resulta que no eres un bicho raro después de todo…
Este fenómeno tiene un nombre y al parecer una finalidad sociológica, y es comúnmente conocido como agresión tierna (cute aggression). Según los hallazgos científicos y psicológicos de la Universidad de Yale, las expresiones dismórficas pueden ser una herramienta útil en el control de nuestras emociones. El investigador principal Oriana Aragón explicó el fenómeno diciendo que los seres humanos regulamos nuestras emociones en un montón de maneras distintas, por ejemplo en algunas situaciones empujamos nuestras emociones hacia dentro o hacia bajo, en otras tratamos de reconsiderar la situación, en otras situaciones tratamos de alejarnos de ellas para equilibrarnos.
Con este nuevo descubrimiento notamos que a veces respondemos con la expresión contraria a lo que sentimos para llegar a equilibrarnos, así que básicamente quieres morder y estrujar o pellizcar una linda cara de bebé porque literalmente el cerebro no puede soportar lo lindo que es y reacciona de esta manera.