La vida de Keanu Reeves ha sido todo lo contrario a lo que podríamos imaginar de un famoso actor de Hollywood. De hecho, Reeves ha sido catalogado como el único y atípico actor hollywoodense jamás imaginado.
El estilo de vida que lleva este magnate está completamente fuera de la realidad de todos los estereotipos que marca la industria del cine.
Y según los expertos, nunca habían conocido ni documentado una historia de vida como la del protagonista de Matrix.
Solo los fanáticos y verdaderos seguidores de este hombre saben que su pasar por la vida no ha sido para nada sencilla. Nacido el 2 de septiembre de 1964, en Beirut, Libano; sufrió una infancia muy dura.
Su padre fue un Geólogo que maltrataba a su madre y hermana, a él lo humillaba públicamente y aunque los abandonó cuando el cumplió dos años, lo siguieron viendo hasta los 6. Poco después se mudaron a Nueva York.
La madre tuvo que trabajar como stripper en clubes nocturnos para sacar adelante a sus hijos. Durante este proceso Keanu tuvo tres padrastros, quienes por desgracia también lo trataron muy mal.
Ahora lleva una buena relación con su madre y le está agradecido de que lo haya sacado adelante.
Las constantes mudanzas de ciudades causaron en este galán de Hollywood una serie de problemas en la escuela. No era buen estudiante e incluso tuvo dislexia temporal durante toda la secundaria.
Fue en Canadá donde su vida comenzó a cambiar un poco…
Cuando todo comenzaba a funcionar en la actuación teatral, se enteró de que su pequeña hermana Kim Reeves, sufría leucemia. Fueron unos de los momentos más difíciles de su vida.
No obstante, ella logró salir bien librada de la enfermedad durante todo lo que resto de su niñez.
“Ella es una mujer muy especial, quizás la más especial de mi vida”
-En la entrega de los Oscares 1998
Comenzó a filmar algunos comerciales y películas para la televisión, y una de ellas fue Mi Idaho Privado, donde participó junto a su mejor amigo River Phoenix. Esta película los unió aún más.
Su amistad fraternal los había convertido en hermanos; no obstante, en 1993 cuando River fue encontrado muerto por una sobredosis. Reeves aún se culpa de la muerte de su gran amigo; cree que pudo haberla evitado haber estado más cerca de él.
Tras la pérdida de su mejor amigo, la vida le pintaba mejor incluso con su pareja Jennifer Syme, con quien tendría a una pequeña a la que la llamarían Ava.
No obstante, las circunstancias del destino lo llevaron a una pérdida más, pues Ava murió en el vientre de su madre en el octavo mes. La muerte de su pequeña no nacida lo devastó.
Y aún en medio de la tristeza por la pérdida de su hija, y en plenas grabaciones de Matrix, en 1999, una tragedia más llegaría…
Era una noche de fin de semana cuando al mundo entero se le notificaba sobre el terrible accidente en una de las autopistas de Los Angeles, donde moriría su prometida Jennifer.
Lleno de dolor y tristeza, terminó de filmar Matrix, y nunca más se le vio con alguna pareja sentimental.
Al parecer no ha podido superar la partida de los grandes amores de su vida. Y a partir de ese momento se le reconoció por algo más que la actuación: su gran corazón.
Es bien sabido que el protagonista de Constantine posee una fortuna de poco más de 350 millones de dólares, y que gran parte de ésta se va a donaciones para hospitales donde tratan el cáncer, estudios científicos y otras obras benéficas.
“El dinero es lo último en lo que pienso. Podría perfectamente vivir con lo que ya tengo por el resto de los siglos”.
-Keanu Reeves
Jamás veremos a Reeves en medio del excentricismo gozando de una lujosa y cara vida. De hecho vive en un sencillo apartamento en la ciudad de Nueva York y pasea como cualquiera de nosotros. Su vestimenta es la más sencilla y poco llamativa, viaja en el metro y come en lugares públicos muy populares.
“Recostarme en la cama con la persona que amo, andar en bicicleta, deportes, momentos felices con mis amigos, conversación, aprendizaje, la tierra, suciedad, una cena con amigos, familia con vino, deliciosa comida, buenas noticias, energía, ánimo y anhelo por la vida. Me gusta estar en el desierto, en espacios extraordinarios en la naturaleza, en lo alto de un árbol o en el barro, compartiendo con mi familia, mis hermanas”.
En una ocasión le dio por festejar su cumpleaños de una manera muy sencilla. Entró a un café compró un muffin con una vela y una taza de té; y cuando se disponía a encender su vela para festejarse, algunos fans se acercaron a saludarlo y a tomarse fotos con él. Accedió de la mejor forma posible e incluso les invitaba a comer un muffin con él.
Hay quienes aseguran que el actor de 52 años sufre de una terrible depresión que le da razón a su estilo de vida y aspecto descuidado, teoría que sostienen la mayoría de los especialistas del mundo del cine; sin embargo, él los ha dejado callados en más de una ocasión con esta sencilla frase:
“Muchos necesitan felicidad para poder vivir, yo no”.
La vida de este actor no ha sido en lo absoluto fácil, pero es un gran ejemplo a seguir para muchos otros que han tirado por la borda las ganancias de su carrera con los lujos y las excentricidades de la fama.
Tal vez no esté en el mejor momento de su carrera, pero ya lo ha dicho antes: en el momento que lo decida podría retirarse sin decir una palabra.