Algo en tu interior quiere que lo hagas. La emoción se te desborda cada que le echas un vistazo a esos cortes de Pinterest con toques ultracoloridos, y esperas con ansias el tener un poco más de dinero, un poco más de tiempo y un poco más de agallas para tomar el teléfono y marcarle a tu estilista de una vez por todas para agendar esa cita. No hay nada malo con tu ‘yo’ actual ni tampoco con tener un estilo definido desde que tienes memoria, ¿pero te has preguntado qué se sentirá dejar de pinear y soñar para ponerte a actuar?
Hay metas prácticamente inalcanzables, como ganarte la lotería y tener la suficiente estabilidad económica para dejar de trabajar por siempre, viajar a Marte, o comer de todo sin engordar un solo gramo. Todo eso puede que ni esté en tus manos, pero algo tan sencillo como un cambio de look, transformará al menos un poco de tu monótona vida.
¡No tengas miedo! Si no te convence tu nueva coloración, solo tienes que ocultar la cabeza un par de semanas hasta que te lo tiñas de nuevo con tu color original, y si lo que quieres es cortarlo pero temes que no te agrade… ¡Recuerda que a fin de cuentas el cabello crece!