Si dormir plenamente es un problema para ti, es casi seguro que tus malos hábitos influyan en tu descanso. Te proponemos poner en acción estos consejos que no son difíciles de ejecutar y, en poco tiempo, notarás la diferencia.
¡Dulces sueños!
1. Haz ejercicio
Mantenerte activo es una buena estrategia que beneficia a tu cuerpo, tu mente, y es estupendo para la hora de dormir. Cuando haces ejercicio y llegue la hora de dormir estarás lo suficientemente cansado y listo para cerrar los ojos; incluso, el sueño es más profundo y despiertas con menos frecuencia.
2. Evita usar la cama para otros propósitos
Ver la televisión, revisar las redes sociales o hacer la tares en la cama evitará que descansemos bien a la hora de dormir.
3. Bye, bye tabaco
El tabaco degenera la salud y también es un enemigo del buen descanso La nicotina dificulta conciliar el sueño, ¡tómalo en cuenta!
4. Disminuye las bebidas con cafeína
El café, el té y las bebidas azucaradas dificultan que peguemos ojo en la noche; además, es más probable que nos levantemos a orinar en el transcurso de la noche.
5. Crea una zona de descanso
Tu habitación debe otorgarte tranquilidad y silencio, así que aleja tu celular, computadora o cualquier otro aparato de la cama para evitar distracciones. El lugar de descanso ideal debe estar oscuro y fresco.
6. Las siestas son buenas, pero deben ser cortas
Un descanso breve al día es beneficioso para continuar con energía nuestra jornada; solo 20 minutos son suficientes para cargar pilas de nuevo. Si duermas más tiempo da por hecho que en la noche darás vueltas en la cama.
7. Y si nada funciona… date un baño
Haz de tu hora de baño un ritual predescanso. Un buen baño caliente quita el estrés, te desconecta del día y facilita el descanso.