El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española requiere modificaciones de carácter URGENTE, y es que nos equivocamos al bautizar tantas cosas que los niños se han dado a la tarea de renombrar aquellos sustantivos cuya referencia era obvia, pero en nuestra forma cuadrada de ver las cosas lo ignoramos por completo.
Estos padres nos comparten, orgullosos del ingenio de sus pequeños, las definiciones que han inventado para explicar ciertas palabras. ¡Y es que no podrían tener más razón! Hemos estado equivocados tanto tiempo…