Todos hemos tenido una etapa en la que no fuimos exactamente los más guapos del universo. Es decir, luego de una infancia en la que no nos importaba comer golosinas como si no hubiera un mañana, una adolescencia con acné, cambios corporales extraños y un montón de malas decisiones al momento de ir de compras en busca de una personalidad que nos definiera (sí, porque gran parte de tus terribles viejos looks los protagonizaron tus espantosos atuendos)… es normal que adoptáramos un aspecto muy poco favorecedor. ¡Pero nunca es tarde para ser un bello cisne!
Afortunadamente maduramos, aprendimos a maquillarnos, a cortarnos el cabello con un buen peluquero y nuestro buen gusto y sentido de la moda mejoró bastante. ¿Tú también fuiste un patito feo alguna vez? ¡Comparte tu foto y haz que todos aquellos que te bullearon antes de ser tan guapo como ahora se retuerzan de la envidia!