Nietzsche afirmó: “la vida sin música sería un error”, pero yo corregiría la frase: “la vida sin música ni café sería un error”, y todos los amantes de esta amarga bebida estarán de acuerdo conmigo.
El café es un brebaje que nos ha acompañado en los momentos decisivos de nuestra vida, que hemos tomado durante crisis existenciales, pláticas con amigos o simplemente cuando disfrutamos de nuestra soledad. Por eso merece un lugar especial en nuestras casas.
Si no puedes comenzar tu día sin tomarte un cafecito y tu paladar se ha vuelto cada vez más selectivo, te recomiendo que crees tu pequeña estación de café, que se convertirá en tu pedacito de paraíso terrenal.