Hornear pasteles, además de ser un arte culinario, también se ha convertido poco a poco -con la creatividad precisa- en un arte visual. Los ingredientes adecuados, el talento y la habilidad de quien lo realice puede convertir al más delicioso pastel en algo aún más agradable para los ojos; tanto que pararte frente a él podría hacerte dudar de si comerlo es buena idea.
La mayoría de estos 30 pasteles deben su magia artística al fondant, uno de las pastas más populares para estos creativos trabajos. ¿Serías capaz de comerlos? ¿O sólo te quedarías parado admirándolos?