Las cosas que salen al azar son las más bellas por su sentido espontáneo, sin pretensión, sin intención, sin nada.
Tal vez la ausencia de estos elementos es lo que nos parece bello, más que el resultado sorpresa en sí; y pueden surgir cosas muy lindas como una fotografía alucinante o una forma inesperada en cualquier superficie.
Aquí te mostramos algunos ejemplos del arte accidental que nos suceden seguido (sólo hay que fijarse).