A él no le gustaba el color que tenía su auto deportivo Nissan Skyline GTR, así que una noche dejó que su esposa pintara el parachoque; vio que dichos dibujos quedaban bien y le pidió que siguiera dibujando el resto del auto. Mientras ella pintaba la parte de afuera del auto, él tuneaba los interiores. Después de unas 100 horas de trabajo se puede ver el hermoso resultado de este trabajo en equipo.