Esta es la historia de Barry, un cachorro que fue el regalo de una familia en Navidad y que el 26 de diciembre… ya lo habían tirado en el contenedor de basura.
Los días después de Noche Buena siempre son muy atareados para los voluntarios del albergue animal PetPals porque siempre hay una gran cantidad de perritos que se abandonan en las calles, pero nunca les había tocado un caso tan inhumano en el que los dueños, literalmente, arrojaran al perrito a la basura como si fuera un objeto desechable.
Uno de los voluntarios recibió una llamada en la que le decían que habían encontrado al cachorro en el contenedor, así que inmediatamente fue a buscarlo: estaba indefenso, solo tenía cuatro semanas de vida, había sido destetado muy joven y extrañaba a su madre; no entendía la razón por la que lo habían tirado.
Rápidamente lo llevaron al veterinario
Estaba lleno de pulgas y padecía anemia, pero lo más triste fue que muy probablemente Barry había sido regalado a alguien que no lo quiso.
Estos abandonos son comunes en tales fechas
Barry fue rescatado y ahora está en búsqueda de una familia definitiva, sin embargo, la mayoría de cachorros no corren con esa suerte: fallecen antes de ser encontrados.
Hay que crear conciencia pues los perros no son objetos y, por tanto, no debemos regalarlos a quienes no los quieren. Es mejor adoptar cuando estamos seguros de que en verdad nos podemos hacer responsables de la vida de otro ser.