Preciosas y con un toque esponjoso muy original, ¿de qué hablamos? De las ideas tan tiernas que tuvieron estas parejas de prometidos para incorporar a sus pequeños hijos gatunos a sus sesiones fotográficas antes de partir al altar.
Te encantará la manera en que las bellas novias y los mininos interactúan, el resultado es un conmovedor y lindo recuerdo que seguramente enmarcarán en el mejor lugar de la casa. Todo es precioso, pero aún no comprendemos por qué las novias se arriesgaron a fotografiarse con sus peludos favoritos: es evidente quiénes son los que roban cámara en cada captura. Míralo por ti mismo. ¡Meowww…!