Quienes tienen un perro en su hogar saben que su amor y lealtad son incuestionables. Siempre están al pendiente de sus amos y tratan con gratitud a quienes les han dado cariño. Pero, además, tienen cualidades increíbles que los humanos solo intuíamos, pero gracias a la ciencia se han comprobado.
Recientemente se publicó en la revista Neuroscience & Biobehavioural Reviews un estudio a cargo de investigadores de la Universidad de Kyoto, Japón. El experimento se hizo con el propósito de medir las decisiones “morales” de los perros.
Ellos saben lo que te conviene
Gracias a esta investigación se ha podido determinar que los perros pueden reconocer cuando una persona es buena o mala con su dueño. En otras palabras, tienen la capacidad para determinar si las personas que te rodean están a tu lado porque verdaderamente te quieren, o si son personas con mala energía que no aportan nada positivo.
Son muy observadores
Para realizar el estudio, los científicos invitaron a 54 personas con sus perros y sin darles a conocer el propósito del estudio, solo tenían que seguir órdenes. A las personas se les daba una caja que tenían que abrir, pero para poder hacerlo necesitaban ayuda. Había actores a quienes se les podía pedir el favor. Unos ayudaban mientras que otros ignoraban la llamada de auxilio de parte de los dueños de los perros.
Posteriormente se intentaba acercar a los animales hacia los extraños, pero los científicos descubrieron que estos solo se mostraban afables con aquellos que ayudaron a sus dueños con la apertura de la caja y rechazaron o se mostraron desconfiados con los que habían ignorado a sus amos.
Existía un precedente
Esta investigación respalda a una previa realizada en el 2011, en la que también se llevó a cabo un experimento y en la cual se determinó que los perros preferían a los actores que daban comida a los mendigos, por encima de quienes los ignoraban.
Los científicos han comprobado que los canes tienen la capacidad de juzgar a alguien con base en cómo se comportan con las otras personas en su entorno, en lugar de sus propias interacciones con dicho sujeto, a lo que llaman “espionaje social”.
Adoptaron cualidades
Se piensa que una de las razones por las que los perros tienen este tipo de “moral” se debe a que han estado en contacto con los seres humanos por más de 15 mil años, tiempo en el que han llegado a adaptarse a la sensibilidad y a las emociones humanas.
Los perros no solo son observadores pasivos de las interacciones de otros individuos. También, en algunas circunstancias, prestan atención a los resultados de la interacción con las personas y evalúan cómo se comportan los actores, para así hacer uso de esa información y tomar una decisión sobre cómo actuar.