Los perros aman ser abrazados, acurrucarse y recibir mimos, y no hay razón para que todo eso cambie aunque ellos hayan crecidos a tamaño de dinosaurio. Estos perros no se han percatado de lo grande que están ahora, pero como los amantes de perros que son estos humanos, no les molesta aunque sientan todo el peso del mundo.
Por cierto, si no has visto la primera parte aquí te la dejamos para que complementes tu impresión con estos enormes perros.