Cuando los dueños de este hermoso perrito supieron que estaban esperando la llegada de un nuevo integrante de la familia, quisieron decírselo a todo el mundo. Así que organizaron todo para que fuera el hermano mayor el que diera a conocer la noticia.
Pero, no resultó como esperaban
“Mi mamá y papá me van a dar un ¡HUMANO!”
A pesar de que el perro es encantador y realmente amoroso, no se veía muy emocionado con la llegada de un nuevo bebé a la casa.
¿Sintió celos, quizás?
Dicen que los perros pueden oler los niveles hormonales de sus dueñas, por lo que quizás estaba un poco extrañado por el repentino cambio de su mamá humana.
Tal vez su cara es porque sabe que en cuanto llegué dejará de ser el consentido…
…O quizás sabe que las largas siestas terminarán
Sea como sea, esperemos que cuando el bebé llegue pueda cambiar su actitud, y creemos que lo hará.