Cuando de juegos se trata, los niños y los perros se pintan solitos. Por lo regular siempre juegan juntos, pero cuando se les atraviesa el mismo juguete favorito frente a ellos, y más aún, que ambos lo quieren, la amistad cambia de inmediato.
Uno de los dos siempre va a salir llorando, y en esta ocasión esta bebita de unos cuantos meses de edad es la que salió perdiendo. Y sí, fue su cachorro quien la hizo llorar, pero descubrimos que él la quiere bastante, porque al ver no dejaba de llorar, se arrepintió e hizo algo muy conmovedor; mira de lo que te hablamos:
Dime ¿si no es lo más cute que verás este día?
No cabe duda que el amor que nuestras mascotas nos tienen es realmente infinito.