Típico, quieres tener un perro en casa y tu padre se opone de la manera más enérgica posible. Entonces logras medio convencerlo -después de muchos días, meses o incluso años- y llegas con un tierno cachorro… ¡Y la magia sucede! De la noche a la mañana el pequeño orejón ya es el consentido de papá y hasta olvidó las reglas de que el perro no podía dormir en la cama o comer dentro de la casa. Y es que, con esa carita peluda y esos ojos tan tiernos, no hay padre estricto que se resista.
Para muestra un botón, mira cómo estos 17 padres se quedaron enamorados de los cachorros y cayeron ante sus encantos.
1. Sí, es el mismo hombre que durante años dijo NO a los perros
2. El perro se queda afuera
Sí papá, claro.
3. ¡Qué asco dejar que lama mi cara!
Cof, cof, ¿qué decías?
4. Los perros son sucios, nunca dejaré que se acerque a mí
Sí, sí, por supuesto
5. No soporto a los perros
Se nota, de verdad.
6. ¡Qué ridiculez ponerle ropa los perros, son animales!
Y supongo que el perro se puso solo esa camisa. Eso debe ser.
7. Que el perro no se me acerque
¿A cuántos milímetros de tu boca te referías?
8. No hay nada más molesto que los perros en los viajes
¿A qué se debe tu foto, entonces?
9. Jamás dejaré que el perro se duerma conmigo
¡Ajá!
10. Yo no quiero perros, son unos mugrosos
¿Quién es el mugroso ahora?
11. La condición es que no se suba al sillón
…
12. Los perros son tontos
¿Y por eso no puedes dejar de verlo y abrazarlo?
13. Si ese animal se enferma yo no lo voy a cuidar
Papá, ya puedes soltar al perro, no está enfermo, nunca lo ha estado.
14. Odio los pelos en mi ropa
Really?
15. Yo no lo voy cuidar, ni le haré mimos
Bueno, esto es incómodo.
16. Mi único amor son mis hijos
Pero ahora hay un nuevo rey.
17. Solo tendremos un mes de prueba al perro
Papá, ya pasaron 3 años.