Claro, los perros son educados, en algunos casos tiernos, controlables (hasta cierto punto), en fin, por algo son considerados como “el mejor amigo del hombre”, pero en ocasiones suceden cosas que hacen que los opuestos se unan, que cosas increíbles sucedan y ésta es una de ellas.
Chito vive en Costa Rica, es pescador en la zona de la selva de ese país, y ha vivido una historia maravillosa de amistad y fidelidad, pero no con un perrito, sino que su gran amigo es Pocho, ¡un enorme, salvaje y atemorizante cocodrilo!
Chito encontró a Pocho con un disparo de bala en la cabeza, así que lo curó y lo cuidó hasta que el cocodrilo estuvo sano. Pero esto no lo olvidó jamás Pocho, quien siguió creciendo hasta ser un tremendo cocodrilo de más de 5 metros de largo, y por supuesto, el poder que caracteriza a esta especie.
¡Este suceso ocurrió hace 20 años y desde entonces son los mejores amigos! Han vivido una relación de amistad, respeto, compañía y muchos juegos, como debe ser en cualquier par de amigos.
Esto puede parecer increíble, pues por lo regular, cuando surge una noticia que incluya a hombres y cocodrilos tienen que ver con que los segundos se comieron a los primeros… pero este es un ejemplo de gratitud, de cariño y de que, por muy terrible que pueda lucir algún ser, siempre hay una posibilidad de acercarse y entablar una bonita relación de amistad.
La manera en que disfrutan mientras están juntos nadando, de verdad es algo espectacular, y muy distinto a lo que hayas visto antes, y nos deja muy claro que ni cocodrilos ni humanos son los monstruos que a veces hemos creído que son:
¡Parece que no todo está perdido en este mundo!