Todos sabemos que ser dueño de una mascota te lleva a responsabilidades inminentes, y atenderla y aprender sobre sus comportamientos es una de ellas. Por eso, saber sobre este padecimiento es muy importante.
¿Alguna vez has visto a tu mascota presionar su cabeza contra la pared? No importa si tu mascota es un perro o un gato.
Si ves a tu mascota haciendo esto, no debes pensarlo dos veces y debes acudir con tu veterinario de confianza, pues podría estar sufriendo un envenenamiento severo por plomo en su sangre o algún órgano; o peor: podría tener una enfermedad prosencéfalo, donde las partes del cerebro y el tálamo se encuentran dañadas.
La enfermedades de este tipo no se determinan por edad o raza, pueden llegar a suceder después de algún golpe o accidente automovilístico, e incluso por alimentos contaminados o de baja calidad.
Presionar la cabeza es un acto compulsivo para dejar de sentirse mareados. Y en general, indica un daño en el sistema nervioso.
Otros síntomas son las vueltas y los movimientos exagerados, cambios en el comportamiento aprendido, convulsiones, daño en sus reflejos y visión; llagas en los pies como consecuencia de sus movimientos compulsivos, lesiones en la cara y cabeza, como resultado de presionarla contra una superficie por largos períodos de tiempo.
El tratamiento dependerá de los síntomas y del diagnóstico. Algunos de los signos requerirán hospitalización y tratamiento inmediato.
Así que si ves a tu mascota hacer esto es muy importante que lo lleves de inmediato al médico, pues tu mejor amigo podría estar sufriendo demasiado.