La historia de este hombre y su perro suena como algo que pasaría solo en una película, pero una vez más la realidad supera a la ficción…
Andy Szasz es un ingeniero civil de 62 años que tuvo que ser inducido al coma a causa de una neumonía; había dejado de respirar justo antes de llegar al hospital. Según los médicos, Andy despertaría en una semana, pero abrió los ojos mucho antes gracias a la presencia de un ser que lo llenó de fuerza: su perrito Teddy.
La presencia de Teddy ocasionó algo increíble
Estelle, la esposa de Andy, hizo todo lo posible para llevar al animal para que conviviera con su amado dueño, estaba convencida de que la interacción entre ambos sería de gran ayuda:
“No hay duda, al estar Teddy todos los días aceleró su recuperación; es un perro tan increíblemente encantador y leal, siempre ha tenido una relación especial con Andy”.
Así era como este lindo peludo ingresaba al hospital
¡Y vaya que su relación es muy fuerte! El can no se separaba de su amigo ni un segundo, quería asegurarse de que estuviera bien.
Y aunque sus visitas dieron resultado, al principio no fue bien visto que un perro permaneciera en la habitación. Sin embargo, este lindo cachorro se convirtió en la excepción de la regla e ingresaba en una bolsa de plástico.
Andy, Estelle y Teddy son una hermosa familia
Una de las enfermeras estaba segura de que el contacto de los pacientes con sus mascotas sería muy beneficioso:
“Los animales pueden ser una gran motivación. Ayudan a la recuperación y proporcionan una experiencia agradable y familiar en lo puede llegar a ser un viaje largo e incómodo en el hospital. Los perros ayudan a estimular los sentidos de los pacientes”.
El vínculo entre ellos es muy fuerte
¡Esperamos que Andy y Teddy sigan viviendo hermosas experiencias juntos!
