Dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, y es innegable el vínculo que el ser humano ha formado con estos peludos. Hay quienes consideran a su mascota un miembro más de la familia; lo consienten y le proporcionan un ambiente feliz. Sin embargo, ¿te has preguntado qué puede hacer infeliz a un perro a pesar de los cuidados?
Aquí te mostramos seis omisiones que afectan el carácter de tu mascota.
1. No ejercitarlo
Este es uno de los problemas más grandes que tienen los dueños de los perros, ya sea por falta de tiempo o porque no llevan una vida activa y saludable.
No sacar a tu mascota a realizar alguna actividad es perjudicial para su salud tanto física como emocional. Los perros necesitan estar al aire libre, y con ello no nos referimos a estar en el patio. Debes sacar a tu amigo a pasear, asegurarte de que tenga la cantidad necesaria de ejercicio. Al hacerlo vas a fortalecer el lazo que existe entre ustedes.
2. Dejarlo solo por mucho tiempo
La falta de tiempo es uno de los factores principales de por qué los dueños no pasan tiempo con sus perros. La mayoría de las personas tienen un trabajo que les obliga a estar fuera de casa por largos periodos, así que deberás plantearte que si te ausentas por más de 8 horas al día, tener una mascota es casi imposible para ti.
Los perros son animales sociales, por lo que necesitan pasar tiempo con sus amos. Cuando están solos se ponen tristes, se estresan e incluso pueden volverse agresivos y destructivos. Tu perro necesita compañía y ejercicio, así que si vas a estar fuera de casa por largo tiempo, lo mejor es que encuentres una persona que se haga cargo de tu mascota mientras no estás.
3. Quitarle su comida y juguetes
Seguramente te ha tocado ver a alguien quitarle el plato de comida a su perro mientras éste se está alimentando, o algún juguete cuando lo tiene en el hocico. Quizá tú lo has hecho. Esto ocurre cuando el amo quiere demostrarle a su mascota quién tiene la autoridad. Por desgracia, esta forma de disciplinarlo es errónea.
Cuando un perro ha sido bien educado y se le han establecido límites claros, compartirá su comida y sus juguetes de buena gana y no tendrán ningún inconveniente en que se los quiten. El hecho es que no hay ningún motivo para hacerlo: si le quitas su alimento o sus juguetes constantemente, él sólo te percibirá como un ser molesto, ya que no tiene la capacidad de entender por qué lo haces.
4. Gritarle constantemente
Una de las peores manera de corregir a tu perro es gritándole. A nadie le gusta que le griten: ¿te imaginas si tu jefe se la pasará gritándote por tus errores? Seguramente la relación con él no sería la mejor y odiarías tu trabajo. Eso precisamente es lo que le ocurre a tu perro.
Cuando todo el tiempo le gritas, lo vuelves un animal estresado. Él sabe que estás molesto, pero no entiende por qué. En lugar de gritarle es mejor que lo lleves al lugar en el que hizo algo malo y lo reprendas explicándole por qué está mal lo que acaba de hacer.
5. Poner a tu perro en una jaula como forma de castigo
Las jaulas pueden ser lugares seguros o necesarios (durante un viaje, por ejemplo) para que tu perro se relaje, pero existen dueños que las utilizan como una manera de castigo. Esto sólo causa que el animal las aborrezca, y cuando necesites usarla para otra cosa, será casi imposible lograr que tu perro entre de buena gana y no se sienta angustiado por ello.
6. Maltratarlo físicamente
Por último, la peor manera de destruir el espíritu de tu perro es agredirlo físicamente. Si esto ocurre, sólo lograrás que te tenga miedo y se vuelva agresivo.
El miedo impide el aprendizaje. ¿Te imaginas que te hagan aprender causándote miedo? Si utilizas la fuerza física al castigar a tu mascota, representarás algo a lo que le teme. No sólo lo alterarás sino que el resultado será lo opuesto a lo que buscas: no logrará aprender nada.