Un perrito herido había sido abandonado en un bosque cercano a la ciudad de Columbus, en Estados Unidos. Afortunadamente el ciclista Jarret Little lo vio mientras pasaba por su ruta de costumbre y lo rescató.
El perrito había sido atropellado
Estaba muy lastimado y le costaba moverse, el problema era que no había otra forma de transportarlo más que en la bicicleta. Así que Jarret y algunos amigos que lo acompañaban se convirtieron en héroes y se turnaron para montarlo en sus espaldas.