Es muy común que una persona que está enojada o molesta pueda disimular tal estado, ya que muchas veces es fácil darse cuenta por el gesto que refleja en su rostro; tal vez la manera en como hace la boca o si arruga la frente.
En esta ocasión no son humanos quienes hacen estos gestos sino los caninos, que demuestran varios estados de humor, desde felicidad, enojo o desconfianza; pero es claro que cada una de sus expresiones son graciosísimas.