No cabe duda de que los animales tienen la capacidad de sorprendernos todos los días. Se han hecho muchos estudios sobre su comportamiento y la forma en que se desenvuelven, demostrando que son seres agradecidos y muy inteligentes, lo que a su vez comprueba que los seres humanos no son los únicos que tienen sentimientos.
Bella es una pequeña ardilla que cuando cumplió cuatro semanas de haber nacido fue atacada por un búho. Estaba a punto de morir, pero por fortuna fue encontrada por voluntarios de Wildlife Rehab of Greenville (Vida Salvaje en Rehabilitación de Greenville), quienes la llevaron a casa de Brantley Harrison, un miembro que se ofreció a cuidarla mientras se recuperaba.
Ha pasado mucho tiempo
Esto ocurrió en 2009. Casi 10 años después, increíblemente, después de haber regresado a la vida salvaje la pequeña sigue regresando a la casa de sus salvadores. Todos los días Bella se posa frente a la puerta de los Harrison, esperando a que alguien note su presencia.
Había otros pacientes
No olvida que fue gravemente herida y que ellos le brindaron cuidado y cariño por casi un año. Pero Bella no estuvo sola en su recuperación: otras tres ardillas se encontraban en observación cuando ella llegó: Larry, Moe y Curly.
Los cuidaron con mucho amor
Ellas vivían al aire libre y eran alimentadas con fórmula, frutas, verduras y muchas nueces. Brantley esperó a que comenzara la primavera para llevarlas de nuevo a su hábitat y pensó que una vez que las pusiera en libertad no volvería a verlas jamás.
Su personalidad no era diferente a la de cualquier otra ardilla que haya criado alguna vez mientras estuvo bajo mi cuidado. El objetivo principal es devolverlos a todos a la naturaleza, así que nunca la traté como a una mascota.
El momento de partir
En abril de 2010 soltó a las cuatro ardillas en el bosque. Felices, corrieron a los árboles, listas para explorar y conocer el mundo. Rápidamente pudieron adaptarse a su nueva vida, pero una de ellas estaba tan encariñada que no le fue tan fácil despedirse.
Comenzó a regresar a los pocos días después de ser liberada. Los otros regresaron también durante unos días, lo que es muy típico y luego, después de una semana o así, por lo general dejan de venir y acercarse a ti. Bella se sienta justo frente a la puerta esperando a que alguien note que ha venido de visita. Incluso ha saltado a la ventana para que alguien la vea.
Ahora son su familia
No ha pasado un solo día sin que esta tierna ardillita regrese a la casa donde una vez fue curada con mucho amor. Llega, se sienta un rato en los brazos de los miembros de la familia y come muchas nueces. Bella realmente disfruta ser un miembro más, y los Harrison la adoran.
Es una consentida
Mi esposo ha llegado hasta el punto en que se le hace tarde para algún evento y está a punto de salir, cuando ve que ella viene de visita y él se regresa para sacar algunas nueces y las deja frente a la puerta. Hace lo que tiene que hacer rápidamente, y después vuelve a casa para pasar un tiempo con ella.
Necesitaba ayuda de nuevo
Un día la pequeña ardillita apareció con una patita lastimada, así que tuvieron que cuidarla de nuevo. Se le suministraron antibióticos y luego fue puesta en una de las jaulas de rehabilitación para que pudiera sanar.
¡Sorpresa!
Cuando estaba casi lista para ser liberada, sorpresivamente dio a luz a tres bebés, por lo que tuvo que quedarse un poco más hasta que sus crías estuvieran lo suficientemente mayores para ser liberadas también.
Fue realmente increíble ver a la bebé que crie poder cuidar de sus hijos también.
Es muy popular
Bella, la ardilla, tiene su propia cuenta de Instagram en la que los Harrison se encargan de contar sus aventuras. Es tan linda y paciente que les permite que le tomen fotografías con sombreros.