Siempre se ha sabido de la guerra sin tregua que hay entre los gatos y los perros, pero a pesar de sus diferencias, hay algo en lo que coinciden: hacernos morir de ternura y risa cada vez que un tornillo sale volando de su cabeza. Y es que, a veces pecan de locos, ¿pero qué sería de nosotros sin ellos?
No cabe duda que tener un animal de compañía en casa es genial, con ellos nunca conocerás el significado de la tristeza y el aburrimiento porque sus ilógicos comportamientos son la inspiración de este y muchos otros artículos.